Cuando me comparo


CUANDO ME COMPARO...


Siempre habrá alguien que sentiré que es mejor y peor que yo. Por más que logre, por más que adquiera, por más que cumpla mis metas si estoy volteando hacia afuera a compararme con los éxitos ajenos siempre sentiré que pierdo. 

Y, en realidad no estás perdiendo, es sólo una percepción. Cuando me comparo observo solo lo negativo, no veo la película completa. Estoy viendo un camino totalmente diferente al mío, dejando de apreciar todos mis logros y éxitos, conectándome con la negatividad, frustración y sensación de pérdida. 

Nos comparamos porque lo hicimos un hábito desde niños, tal vez nuestros padres nos comparaban con hermanos, primos, semejantes que "eran mejor que nosotros" en su idea. Puede ser que también maestros o autoridades ponían a alguien de ejemplo y eso nos hacía sentir menos. El que otro sacara mejores calificaciones, premios, éxitos nos hacía sentir inferiores. Si, tal vez otro sacaba mejores calificaciones que tú, pero no tenia tus habilidades sociales, o creativas, artísticas o deportivas, y tal vez esa persona se sentía inferior comparándose contigo en algo donde te veía superior. El que se compara...pierde, deja ir una oportunidad y no aprende. 

La Verdad es que cada persona es única e irrepetible. Cada quien tiene valores, talentos, dones y aptitudes diferentes. Te comparto 5 tips para soltar el hábito de la comparación y entrar en el infinito universo de la creatividad y la aceptación.

1. Ama tu camino. 
Es único, perfecto porque así eres tú. Aprecia tus propias aptitudes, virtudes y dones. Valoralos y validalos para que, al amarlos, puedas encontrar la mejor forma, la tuya. El nadador que está en la competencia, pierde si voltea a ver a sus contrincantes. No existen contrincantes, sigue tu propio camino, aprende de tus errores, aceptate.

2. Escucha tu corazón. 
El entusiasmo, el deseo y el anhelo son la guía para elegir tu camino. Cuando siento pasión y entusiasmo definitivamente es tu forma correcta y dejo de voltear a ver a los demás. Los deseos y anhelos que vienen de tu interior, esos que te dan la fuerza ilimitada, la esperanza para seguir adelante son los que vencen cualquier obstáculo...y entonces entiendes que sea cual sea el resultado es perfecto.

3. Sé creativo. 
Aunque haga las mismas acciones que otros, tal vez darán resultados diferentes en mi porque mi energía, mi esencia es irrepetible. La creatividad es un aliado para crear caminos nuevos, para encontrar tu propia forma.


4. Persevera. Hay plantas que requieren pocos días para brotar. Otras, requieren paciencia y tiempo para formar raíces profundas y firmes que sostengan el éxito permanente. Seguir adelante y mantenerte enfocado en tu deseo, permite que, tarde o temprano recibas los frutos de tus siembras. Es una ley.

5. Aprende. En lugar de sentirte menos con esa persona que te comparas, aprende de ella, en realidad es un maestro que trae una enseñanza para ti. Celebra los éxitos de los demás y sobre todo, bendice y agradece los tuyos. 


La planta de lavanda no se compara con un cedro, cada uno es diferente, ofrece al mundo balance, equilibrio y perfección. Coexisten en perfecta armonía ofreciendo diferentes bendiciones al mundo.  Recuerda, todos somos Uno y juntos hacemos el Todo. 


Cuando reconoces tu valor tu vida cambia para siempre.


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